El pasado junio (2018) se inauguró una exposición en la Sala-X de Pontevedra (en la Facultad de Bellas Artes) de la que pude formar parte. El título de la muestra es <<Proyecto táctil. Probas e texturas>> comisariada por Silvia García, decana de la misma facultad, en colaboración con La ONCE.
Esta exposición está dirigida para aquellas personas que no pueden ver; por eso las obras que conforman la muestra se focalizan exclusivamente en el tacto. Uno de los sentidos más olvidados en las exposiciones de los museos: la frase «No tocar» nos lo recuerda.
Pues todo lo contrario, esta ha sido una experiencia en toda regla para el tacto, para tocar, para sentir y experimentar las texturas.
Me hace especial ilusión hablar de la pieza que presenté porque ha sido una pieza colaborativa con mi alumnos de las clases de pintura (los más pequeños). Se trata de una colección de pintura seca que hemos ido arrancando de la paleta. Con esta pieza hemos dado la posibilidad de tocar la pintura a la gente que no puede contemplarla. ¡La sensación es magnífica os lo aseguro!
